Cada tanto todo se desestructura, se derrumba, se cae y no lo atajo. Y dejo de escribir, y nadie sabe por qué. Soy un mar silencioso, pleamar. De pronto "nada ansío de nada, mientras dura el instante de eternidad que es todo, cuando no quiero nada". Me comí a Girondo y me cayó para el orto. Me voy a tomar un alical.
2 comentarios:
girondo cae pesadito, ni te cuento el conde de lautreamont... uruguayo tenía que ser...
uh.. si, como ese "kundera" o "bandera" o wtv.. y la horrible levedad de ser... o ... como sea
si te amo che,
Sierra.
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